Las lesiones pueden ser causadas por una torcedura, un tropiezo o una caída y suele haber inflamación y dolor.
Estos son algunos pasos que pueden ayudarte:
- Retirar el calzado.
- Aplicar hielo
- Evitar apoyar de forma inmediata la parte lesionada.
- Intentar elevar la extremidad.
- Aplicar una compresión baja con vendaje para limitar el movimiento.
- Si el dolor persiste, lo recomendable es realizar una radiografía para evaluar daños mayores.